Factor determinante temporal en la conducta de un perro: el viento

Muchas veces al pasear a nuestro perro no comprendemos por que ese día a actuado de forma distinta, mas excitado, mucho mas activo y un tanto desobediente.

La explicación se debe a un factor físico que debemos empezar a plantear con una pregunta, ¿cual es el mayor sentido de los cánidos?, la obvia respuesta es el olfato.

Bien,entendiendo esto es fácil determinar que si hay viento las partículas se desplazan a mayor velocidad trasladándose a incluso varios km, eso significa que nuestro perro esta recibiendo muchísima información que a veces el cerebro no puede clasificar y por lo tanto y debido a ello el perro reacciona de forma estresada y nerviosa, intentando encuadrar todos y cada uno de los olores percibidos. 

Una reacción muy típica de los perros que intentan posicionar cada uno de los olores es la postura de venteo, levantando la nariz para percibir la procedencia de ese olor. 

Otra reacción es rastrear el suelo siguiendo las partículas impregnadas que el viento haya podido desplazar, como por ejemplo el olor de las migciones típicas del marcaje del territorio, ya que al ser transportadas de forma aérea pueden confundir al perro en su lugar habitual de paseo pensando que puede haber un nuevo miembro dominante por la zona.

También es mucho mas fácil que le llegue de forma perceptiva olores de perras en celo, animales muertos o incluso de comida y eso hace que el perro reaccione temporalmente mas excitado, intentando buscar una explicación a todo ese colapso que se le crea, es por ello que en la mayoría de casos incluso se mostraran no reactivos a nuestras ordenes pero no por desobediencia, si no porque intentar procesar toda la información es algo prioritario para el, donde ademas pueden despertar estímulos y/o sentidos naturales tan poderosos que hagan que pierdan la concentración en nosotros, por lo tanto no intentaremos que nos obedezcan ya que no serviría de nada y la forma correcta de actuar seria no soltándolos, para así evitar que un perro que huela una hembra en celo por ejemplo salga corriendo y al poderle mas el estimulo que nuestra orden no reaccione a nuestra llamada. 

Tampoco es bueno intentar ejercicios de obediencia ni de trabajos deportivos, ya que si se intenta y no se consigue el objetivo previsto para la jornada podría trasladarse a una frustración para nosotros por no saber que ha pasado y el perro se ira para casa sin haber cumplido, lo que podría tomarlo por rutina y complicar el proceso de adiestramiento o de trabajo deportivo.

Fuente Gismir