Perros con problemas de conducta

¿Por que muchos propietarios tienen problemas con sus perros?

La respuesta simple es por su propia culpa.

La respuesta argumentada viene a continuación:

Una inmensa mayoría adquiere ya sea a través de adopción o compra un perro de una determinada raza, mayormente por su atractivo físico ya que de entrada es lo que nos llama la atención de cada una de las razas teniendo pocas veces en cuenta el carácter propio de cada una de ellas.

La pretensión en gran medida es tener un perro social y gozar de su compañía, pero eso no viene cual programa en un disco duro de serie si no que cada ejemplar requiere de un trabajo y dedicación siempre diferente para llevarlo a cabo.

Bien, tengamos en cuenta entonces que todas las razas son producto de la selección por la mano del hombre buscando una utilidad determinada para desarrollar una actividad, dicha utilidad sobre todo reside en el carácter y comportamiento de cada raza por lo que si los físicos nos atraen tenemos que tener en cuenta también ese carácter natural racial.

Esto nos hará entender varias cosas, entre ellas que es el genotipo y el fenotipo:

·El genotipo nos marcará la herencia adquirida de los progenitores en cuanto a elementos de comportamiento y carácter incluidas enfermedades neuronales.

·El fenotipo nos marcará la herencia adquirida en cuanto a físico, estructura, forma y enfermedades físicas.

Sumado a esto tenemos que valorar también que tiene en cuenta un criador, pues si varía en la selección de forma confusa ejemplares tímidos y con un ligero grado de inseguridad, posiblemente a pocas generaciones vista tendremos ejemplares atípicos camuflados en una falsa sumisión ya que posiblemente con muchas garantías de acierto tendremos perros reactivos por esa inseguridad intra específica instaurada en una mala selección con lo que el propietario se encontrará con un problema que dependiendo de su experiencia con perros puede ser de mayor o menor gravedad, creciente en muchos casos.

¿Como elegir a nuestro compañero?

Con todo lo anterior claro y hablando de ejemplares con caracteres típicos raciales empezaremos a pensar en escoger compañero, teniendo en cuenta nuestro propio carácter, nuestro nivel de actividad diaria, nuestra predisposición con el perro, el espacio que disponemos en la casa, nuestra paciencia a la hora de adiestrarlo y nuestro nivel de conocimientos, tiempo que le vamos a dedicar y función para la cual queremos al perro.

Sobre el tiempo algo que me gusta dejar claro si disponemos de poco tiempo la mejor elección es no tener perro, fácil y concisa.

Luego podemos decir que todos los perros comparten una base común en cuanto a instintos, competencias, recursos y comportamiento genérico pero luego eso varía en función de cada raza y por último en cada ejemplar y aunque eso se puede modificar y adaptar a nuestras necesidades a través de la modificación de su conducta natural es como tener un perro programado por la inhibición ya que no hablamos solo de condicionamientos si no de inhibidores del carácter natural.

Entonces debemos empezar a pensar primero si podemos tener un perro y luego que tipo de perro se ajusta a nosotros mas allá de los gustos personales en cuanto al tipo físico, y la gran pregunta, ¿por que queremos tener un perro? si la respuesta es para quererlo como un hijo entramos en el primer error no es un ser humano y si lo tratamos como tal solo tendremos un animal cargado de dependencias, inseguridades e incluso acciones reactivas a causa de todos nuestros refuerzos negativos aplicados, bien por desconocimiento, bien por ego y egoísmo.

¿Esto quiere decir que escojamos la raza la raza que escojamos no nos servirá para nuestras necesidades? si puede servir aunque hayan razas que gracias a su carácter estandarizado nos de mas garantías de acierto en la elección para realizar según que actividad, cabe la posibilidad que un ejemplar de una raza atípica en una función reúna las condiciones adecuadas para ejercerla.

Conclusión, un perro no nace con problemas, los adquiere con el tiempo por un compañero humano que no está a la altura del perro y que comienza desde la elección del tipo y raza de perro, el ambiente en el que se cría, las normas y educación que recibe y el tiempo que recibe de ejercicios y juegos.

Fuente Centro Deportivo Gismircan